Mostrando las entradas con la etiqueta emociones. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta emociones. Mostrar todas las entradas

jueves, agosto 23, 2007

Somos seres humanos

"El ajedrez es 80% emociones" me dijo un amigo mio maestro y es cierto... ¿cuantas veces no hemos pasado por alguna cosa personal y nos repercute de manera directa en nuestro juego? los nervios, el cansancio, la felicidad, la tristeza, el enojo... tantas emociones que inciden en el ajedrez...

He de confesar que a mi me trastornan las emociones, desde chica he sido una persona nerviosa al jugar ajedrez y mi entonces maestro me decia que el tener nervios es bueno, siempre y cuando los pueda canalizar en la partida,
así que siempre me quedaba la duda de ¿cómo? ¿cómo canalizar mi energía a la partida? ¿cómo alejar todos los fantasmas personales y aplicarse simplemente a jugar?

Creo que este tema tambien tiene algo que ver con el género, quizas los hombres de cierta forma pueden enfocar la vista o la concentración más fácilmente y dejar atras los problemas personales que una chica, que tenemos la caracteristica o virtud de poder tener nuestra mente en varios procesos a la vez, pero, si hay algun problema, éste puede utilizar la reserva de energía o atención que pudiera aplicarse a la partida. Ya metiendonos un poco en el tema, ¿qué sucede entonces si el hombre se concentra sólo en el problema?

Miedo, ira tristeza, felicidad, enamoramiento, desenamoramiento, alegria, envidia, celos, orgullo, coraje, aburrimiento, ambición y mil emociones más se me ocurren en este momento que han interferido en mi vida de ajedrecista...

Por solo poner un pequeño ejemplo, la primera vez que jugué con una Gran Maestro, en el torneo internacional Carlos Torre, se agolparon en mi el miedo a perder, la ambición de ganar, alegría de jugar con alguien tan bueno, coraje intentando hacerlo bien.
Perdí mi partida y aprendí la lección no solo sobre el tablero sino a la vez en mi corazoncito emotivo.

El dia de hoy estoy contenta porque el ajedrez me ha hecho sentir al máximo, puedo perder partidas y ganarlas, al igual que los torneos, se gana y se pierde, pero de lo que no tengo duda es de que tambien se VIVE